En el sistema de educación pública de Ecuador

Durante los años 2015 y 2016, la Universidad del Azuay y la Secretaría Técnica de Discapacidades del Ecuador, SETEDIS, estudiaron y analizaron una muestra de 10.236 participantes. Los resultados permitieron concluir que, menos del 1% de los encuestados, tiene conocimiento sobre las necesidades educativas de los estudiantes con trastornos de aprendizaje.
La Universidad del Azuay y la Secretaría Técnica de Discapacidades del Ecuador, SETEDIS, aplicaron encuestas 10.236 maestros y maestras de las zonas rural (37,80% de los encuestados laboran en establecimientos de la ruralidad) y urbana del país.
A partir de este estudio se pudo conocer que, pese al marco legal y a las políticas que desde el Estado se crearon para velar por la inclusión de los niños, niñas y adolescentes con necesidades educativas especiales (NEE), apenas el 34,23% de maestros y maestras las conocen.
Otro dato que llama la atención es que el 59,30% de los encuestados cuenta con un título en Educación. El 40,70% restante tiene títulos que nada tienen que ver con esta rama académica.
Sin embargo, la cifra más preocupante corresponde a la pregunta sobre el conocimiento de los encuestados acerca de los métodos de enseñanza- aprendizaje que deben aplicarse en las aulas a los niños que presentan trastornos generales de desarrollo, como autismo, asperger, TDA, TDAH.
A más del bajo conocimiento sobre este tema específico que engloba al 93,18% de los maestros y maestras encuestados, solo un 7% sabe algo y el 0,29% dispone de un real conocimiento de las necesidades educativas especiales que requieren estos estudiantes.
Estos datos permitieron concluir a los expertos responsables de este estudio que, casi ningún estudiante con un trastorno, puede acceder a un aula inclusiva como lo estipulan las leyes y normas vigentes.